Babasónicos

Arrogantes, desfachatados, infames y carismáticos, los forajidos de siempre se reinventaron el año pasado con Discutible, su duodécimo disco de estudio donde sienten que comenzaron una nueva etapa de la banda y ponen en valor los ecos, hiatos y replantea cuestiones y consumos tanto filosóficos como culturales. 

“Cuando empezamos a hacer Discutible habíamos terminado una época que tenía que ver con Impuesto de Fe, donde empezamos a reversionarnos y descubrimos algo que nunca habíamos usado: el silencio. Esto nos permitió usar menos elementos y, a la vez, ser más grandes incluso”, dice Diego Tuñón, productor y tecladista de Babasónicos, acerca de la obra que les volvió a despertar un entusiasmo creativo, que vivieron todos como un renacimiento. 

En un año agitado que los encontró presentando el disco en Europa, México y Latinoamérica, Tuñón expresa acerca del proceso de composición. “Cuando arrancamos el desarrollo creativo, tenía muchas más ganas de hacer música de laboratorio que de ensayar, así que creo que el disco está planteado de esa manera. Siempre que se hizo hip hop, se lo hizo desde un escritorio y quise encararlo de esa manera. No tanto ruido. Más silencio y control”, resume. 

Esta nueva etapa despierta nuevos sentimientos en la banda, y el productor concluye anunciando nuevo material para el año que viene: “ya tenemos unas canciones terminadas muy lindas, en un mood mucho más extravagante, pero que pertenecen al mundo Discutible y saldrán muy pronto”.

Siempre experimentales e irreverentes, Babasónicos renueva su discografía con una propuesta discutible donde cuestiona todas las realidades posibles.