Por Esto Salgo

Festival Nuestro



 El espectáculo musical que reúne a los artistas locales con propuestas disruptivas.

 


Luego de cinco años, el Nuestro encontró un lugar establecido en la grilla de los festivales más convocantes del año. Con una cruza de estilos y géneros, apostando cada vez más a ritmos urbanos y a la paridad de género, la quinta edición se vivió llena de frescura, dinamismo e identidad local.

¿Qué es nuestro? ¿Cómo se identifica el sonido local? El ciclo buscó encontrarle una respuesta a estas cuestiones y su contestación fue mutando a través de su trayectoria: desde Bersuit Vergarabat y La Beriso en 2017, pasando por Dancing Mood y El Kuelgue, hasta Miss Bolivia, Juana Molina y Nathy Pelusso. Éstas tres marcaron el pulso de 2019 en Tecnópolis como punta de lanza de una generación que busca cada vez más referentes femeninas en los escenarios.







En una edición donde la lluvia amenazó constantemente, artistas internacionales como los colombianos Monsieur Periné y la chilena Francisca Valenzuela se cruzaron con sonidos variopintos y locales como los de Las Pastillas del Abuelo y Chango Spasiuk junto a Chancha Vía Circuito. 

«Celebro la diversidad del Festi Nuestro, un espacio artístico de sinergia».


DAK1LLAH

“Tengo una relación muy especial con el Nuestro porque fue uno de los primeros en darme un espacio para mostrarme y estoy muy agradecida de formar parte de un ciclo que invita a la diversidad”, dijo la trapera Dak1llah, quien participó el año pasado y volvió este año para rapear sobre las bases de Villa Diamante. 

Nathy Pelusso desplegó su corashe desde el comienzo con un fragmento de “La grasa de las capitales”, de Serú Girán, meneando con “La Sandunguera” y perreando con “Natikillah”, con un vestido de volados blancos, mezcla de merengue italiano con bailarina de flamenco. 

Un ciclo que se actualiza, móvil, diverso y, sobre todo, nuestro.