Fuego
Una clase de cocina donde los sentidos son los agasajados. En un ambiente íntimo, cálido y distendido, compartir los conocimientos y, después, comer rico.
Quiero recomendaciones
Nació como un restaurante a puertas cerradas, hoy es más que eso. Fuego propone encuentros culinarios donde, a partir de diferentes propuestas gastronómicas, se educa el paladar y se cuentan secretos y técnicas de la gastronomía.
Nicolás Díaz Martini es el chef que abre las puertas de su casa -y de su cocina-, y propone una experiencia sensorial: colores, formas, aromas, texturas y sabores. “Fuego reúne todo lo que me gusta, cocinar y enseñar sobre lo que me apasionan”, cuenta Nicolás.
Fuego recibe, cada noche, a un grupo de aproximadamente 10 personas, que no se conocen entre sí. Llegan solos, de a dos y en grupos más grandes. Se sientan alrededor de una mesa, en la cocina, con una copa de vino blanco en la mano.
El anfitrión invita a oler, tocar y probar los ingredientes. Mientras explica cómo elaborar cada uno de los cuatro platos, paso a paso, los comensales hacen preguntas, en una charla íntima y relajada.
Después que probar y de sentir los aromas de la comida, cuando la clase termina, ya todos están listos para la cena. Es el momento del placer: compartir la cena y un vino tinto con el de al lado y disfrutar de la conversación.
«Las especias son las protagonistas indiscutidas de todos nuestros encuentros».
Nicolás Díaz Martini
Los talleres de Fuego son excelentes para aprender, perfeccionar y conocer diferentes cocinas del mundo y sus secretos. Se especializan en cocina asiática y especias, nórdica y conservas.
En esta oportunidad el taller fue de conservas. Se explicaron técnicas, a partir de diferentes recetas como escabeche de Calamar, pickles, ajíes confitados, Chutney de Mango, Pescado curado estilo Fuego y Sweet Sour Chili Sauce.
Cierre
Aprender los secretos culinarios de un gran chef para llevar la cocina del día a día a otro nivel.
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