Arte & Cultura

Museo del Whisky



El universo del whisky está lleno de pasión, tradición e historia y en Buenos Aires se encuentra el museo con la colección privada más grande del mundo.

 


En el tranquilo barrio porteño de Villa Urquiza se esconde uno de los mayores tesoros de la ciudad y le pertenece a Miguel Ángel Reigosa, dueño del Museo del Whisky Argentina, quien pasó de tener un peculiar interés por esta “agua de vida” para ser el fundador de la colección privada más grande del mundo. 

Su pasión comenzó en la adolescencia, tras una noche de copas con amigos. Con el correr del tiempo esa afición se transformó en un proyecto rentable. Hoy es el dueño del segundo museo de whiskies más grande del mundo, con exactamente 3100 botellas en su haber.







Al ingresar al edificio de la calle Monroe, uno se sumerge en un ambiente digno de ser admirado: una gran barra para disfrutar de una amplia variedad de whiskies, cocktails y otras bebidas. Asimismo, un restaurante con una formidable oferta gastronómica y una galería con estantes vidriados que hace culto a una gran variedad de botellas de ron, gin y otras espirituosas con presentaciones eclécticas. Allí se aprecian botellas con diferentes años de añejamiento y de formas de lo más extravagantes: trenes, computadoras de los años ochenta, cisnes, ediciones especiales inspiradas en personalidades como Elvis Presley e incluso un 62 Gun Salute, obsequiado por su Majestad Isabel II, reina de Inglaterra.

«Somos el segundo museo de whiskies más grande del mundo. Incluso, la reina de Inglaterra, Isabel II, me obsequió un 62 Gun Salute».


Miguel Ángel Reygosa

Con más de 4100 socios, el Museo del Whisky no es solo un lugar de contemplación. En él se realizan catas, cursos sobre la producción local e internacional y viajes a las coordenadas más relevantes para la industria. 

El museo es un excelente espacio de encuentro para sumergirse en este apasionante universo y conocer los secretos de la bebida elegida por amantes de la distinción.